RESUMEN Y REFLEXIONES CAMINO LEBANIEGO Y VALDINIENSE EPILOGO CAMINO DE LEBANIEGO VALDINIENSE. Me veo obligado a escribir un epílogo del viaje realizado hace unos días. Llevaba varios años pendiente con la idea de realizar este camino por sus características montañosas, una idea que vino tras realizar la ruta “ La senda de Camille ” en Pirineos, y hace dos años al hacer el camino olvidado en bici y coincidir en Cistierna con un andarín haciendo el valdiniense. Así que de manera algo precipitada me decidí a realizarlo. He de decir que ha supuesto una experiencia nueva y única para mi, era la primea vez que hacía el camino sólo, andando y me resultaba la idea algo inquietante, emocionante. Al final ha sido una gran satisfacción la experiencia vivida, he conocido unos paisajes increíbles, personas encantadoras, momentos duros, y como dicen sudor y lagrimas, pero me quedo con la alegría de lo que he vivido. La cara de satisaccion de heidel alemana cuando me comentadba su idea de llegar a fisterra, al km 0, ese rostro de alegría no se me olviará, esa ilusión enmarcada cuando con sus palabras intentaba explicar lo que esperaba encontrar, y Ricardo, ese artista con ganas de jubilarse para realizar su camino, cuando enseñaba su obra. O aquel que buscaba el silencio personal, , o el deportista, buscando la mayor dificultad, les escuchabas y te olvidabas de tu dolor de pies, quejica pensaba. cómo Al final no pude realizar el camino de mi intención que era unir el vadiniense con el salvador a través del olviado en cistierna, el camino nos pone a cada uno en su lugar me decían, y así ha sido. Pero ahí está para otra ocasión. El trazado dsel camino se . Cuando terminas te preguntan las motivaciones para realizar el camino, que pueden ser varias, epiritual, deportiva, cultural, religiosa. En mi caso salvo religiosa, era una mezcla de las tres, aunque lo pienso y al final hay una línea muy fina entre lo espiritual y religioso difícil de ver. De espiritual teniía la idea, y costumbre de enterrar parte de las cenizas de mi padre en algún punto del camino, y como anteriormente debía ser algún lugar que salga de mi interior, no tiene que ser una zona o lugar emblematico. Espiritual, si, a veces piensas, es casualidad?, momentos delicados que al final aparece la solución, casualidad? No hay sitio para dormir ni alrededor y te ofrecen un techo, casualidad? Que en la desesperación no encuantras el camino y al girarte aparece… casualidad? Estás muy cansado, con hambre y dolorido, y donde menos lo esperas, en la nada, aparece un banco con mucha sombra,… casualidad? Es posible, seguro que hay libros y libros enteros hablando de ello, etc… pero me quedo con lo que sentí en esos momentos. A nivel deportivo, ha supuesto un reto para mi, tanto en distancia como en tiempo y carga, RESISTENCIA, mejorar? Con respecto a la motivación cultural, no cabe duda que los paisajes que he conocido han sido espectaculares, La senda del nela, sinuosa entre arboles de ribera abrazando al rio con sus meandros tranquilos y fuertes corrientes, las verdes praderas salpicadas de las cabañas de pastores, las montañas que se ergian imponentes de los picos de Europa o aquellos montes de leon, y las nubes y niebla con sus abrazos, los valles de la llanada con sus campos ocres de cereales, verdes del maíz y motas negriamarillos de girasoles con sus flores como un baile todas al sol al unísono. Las aldeas montañosas con sus muros de mampostería rígidas como su clima y temple, o los pueblos leonesses con sus paredes de adobe, para agradecer los días de verano y calentar los fríos inviernos, el verde de los prados con la niebla sinuosa engullendo los caseríos y el sol alumbrando las cabañas refugio de pastoires en lo mas alto con sus bosques mágicos, de hayas, castaños y encinas, con sus sonidos y sus sombras, cerrados, sintiendo como si invadieras su territorio, notando en el cogote cientos de miradas ocultas, y bajabas a la meseta junto al aroma del hinojo del tomillo y manzanilla como en una melódica tisana de aire puro mezcla de sensaciones. Escuchas el bravo rumor del agua, del Esla, protestando, reclamando su espacio entre estrechos cañones, y en los diferentes caminos, algunos infinitos al horizonte otros abriéndose paso a tu camino, sobre calzadas romanas, testigos mudos del paso del tiempo, admiras las proezas de los hombres en su hacer, en su lucha por la supervivencia, ves el rio volviéndose manso, como un espejo, reflejando en las orillas como hermanos gemelos aquellas moles calcáreas que en su día estuvieron bajo un templado océano, sentia el viento meciendo las copas de las choperas, y tus pasos mientras caminas embuido en tus pensamientos, pasas pueblo a pueblo, casa a casa para llegar a tu destino, tu camino. El karma, al pasar por Riaño y mi mente trasladarse a mi época de Scaut, me aordé de la piedra, y al llegar a casa y pesar la mochila, lo vi. El karma. El pedrusco dentro de la mochila, por listo. El doble de peso. responder jromeroz Imagen de jromeroz Vie, 15/09/2017 - 23:48 El miedo hacia lo desconocido es intrínseco al ser humano. Abandonar la cotidianidad y lanzarse a una aventura que ignoras cómo resultará produce temor, es cierto. Pero puedo aseguraros, después de mis dieciocho caminos consecutivos año a año, desde diferentes puntos de partida, que difícilmente encontraréis una experiencia más gratificante para el cuerpo y, sobre todo, para el espíritu. Etapa 1 28 km +607 -407 Etapa 2 50 km +1800 -1400 Etapa 3 40km +1065 -760 Etapa 4 30 km +485 -585 Etapa 5 43 km +239 -355 Etapa 6 24km +50 -107 Etapa 7 20 km +176 -138 TOTAL KM 235 +4422 -3752